El peregrino

Íñigo López de Loyola (1491-1556) nació en Azpeitia, un pequeño pueblo de Guipúzcoa, España. Sus padres, Beltrán y María, tuvieron 13 hijos, de las cuales Ignacio era el último. Tras haber sido herido en la defensa del castillo de Pamplona tuvo que permanecer inmóvil durante el reposo a que le obligó la lenta recuperación de su herida. Vivió una conversión interior que fue el comienzo de ulteriores aventuras, haciendo de él un peregrino movido por un inextinguible amor a Jesucristo....