La oración personal

Madre de la Compañía

Joven, valiente, frágil, habitante de un pueblo gobernado por un imperio extranjero, embarazada de un modo único e incomprensible, que sabe desde el principio que lo que albergan sus entrañas no es su propiedad… Emigrante forzosa dando a luz a la intemperie, madre sabia que anima a su Hijo a comenzar su misión en una boda, que lo acompaña con su presencia y oración, seguidora fiel hasta el final -donde la profecía se hizo verdad al ver a su Hijo crucificado, “una lanza te traspasará el...

Contento, Señor, contento

Alberto nació el 22 de enero de 1901, en Viña del Mar, Chile, en el seno de una familia cristiana. Desde niño el sufrimiento traspasó su vida pues con sólo cuatro años perdió a su padre víctima de la violencia. Fue en el colegio san Ignacio donde conoció a los jesuitas y fue naciendo su vocación. Sin embargo, la difícil situación económica de su familia le imposibilitó cumplir su sueño de entrar al noviciado hasta 1923. Como jesuita, su carisma y la alegría contagiaban a todos los jóvenes...

Los Ejercicios de mi vida

A los dos meses de entrar jesuita, hace largos años, hacíamos en el noviciado los Ejercicios largos, de mes. Yo creía que eran unos días silenciosos y tranquilos. Pero, inocente de mi, cuando acabamos, el corazón me latía acalorado, tanto como para pedir ir de misiones a Cuba. La misma decisión que la mayoría de mis compañeros. Algo hermoso había ocurrido en aquellos días, a veces no fáciles. Algo se había encendido en nosotros: ¿una llamada? ¿una chispa, una luz, un encuentro…? ¿Un...

Partido a partido

Una persona: Mis padres. Un personaje histórico: Christian de Chergé. Un santo: San Edmundo Campion. Un lugar: el barrio de Bourj Hammoud en Beirut. Un libro: León el africano, de Amin Maalouf. Un personaje (real o ficticio) en el que te sientas reflejado: Coronel Hannibal Smith del Equipo A. Una canción que podría hablar de ti: Nómadas de La M.O.D.A. Una cita: "Las ligas se ganan partido a partido" de Diego Pablo Simeone. Tres cosas innegociables en tu vida: La constancia, el compañerismo...

Vidas Entregadas III

Vidas Entregadas es una serie de vídeos en la que presentamos la vida de compañeros jesuitas que han entregado su vida al servicio de Dios, la Iglesia y el mundo. Su testimonio nos emociona y nos anima a entregar también la nuestra. En el tercer capítulo, nos adentramos en el taller del hermano Costas, misionero en Mozambique durante 20 años y renombrado carpintero. De sus manos salieron la mitad de los muebles y estructuras de la Casona de los Jesuitas en...

Sin máscaras

Cristo nos llama a seguirlo en pobreza y en humildad; es decir, quiere que le sigamos quitándonos nuestras máscaras, las cosas que nos hacen parecer «mejores»: el dinero que tenemos, los estudios que hemos hecho, nuestras «espléndidas» habilidades… Nos pide dejar a un lado las seguridades materiales, y quitar importancia a aquello que creemos que es nuestra fuerza. Para ser jesuita no es necesario tener cien dones y mil habilidades, Él no llama según lo que nosotros creamos poder dar. Él...

Nada especial

Últimamente me viene a la memoria lo que varias veces he escuchado a muchos jesuitas jóvenes: «los hermanos me han enseñado qué es la vocación jesuita». Pedro Claver, «esclavo de los esclavos» en Cartagena de Indias, aprendió a ser jesuita en la amistad compartida con Alonso. Dos santos jesuitas: un hermano y un sacerdote. Los jesuitas hermanos son hombres que, teniendo vocación a la vida religiosa en la Compañía de Jesús y profesando sus mismos votos, no se sienten llamados al sacerdocio...

Apóstol del Sagrado Corazón

Claudio de la Colombière (1641-1682) nació en el sur de Francia. Estudió en un colegio de jesuitas desde muy temprana edad. Y con 17 años entró en la Compañía. Habiendo enseñado durante dos años en Avignon, estudió teología en París y fue ordenado el 6 de abril de 1669. Su vida fue breve pero intensa. Vivió la guerra, el destierro, trabajó en Inglaterra, donde fue encarcelado por celebrar la Eucaristía. En estas circunstancias fue transformando su corazón para que fuera como el de...

Tres palabras clave

Vocación, esperanza y responsabilidad son tres palabras que siempre van de la mano. Cada vez que un joven generoso es capaz de decir “creo que Dios me llama a ser jesuita”, la esperanza se abre paso como una semilla en la tierra. Recuerdo bien cómo la mera intuición de ser sacerdote en la Compañía de Jesús tenía la fuerza suficiente para proyectarme al futuro y hacer que me entretuviera durante horas entre ensoñaciones de entrega a Dios y servicio al prójimo. No hay vocación que no implique...