El Señor se da cuando quiere y como quiere
"Me gustaría estar más tranquilo, más centrado, prepararme mejor para lo que voy a recibir, tener el tiempo necesario, pero la vida tiene un ritmo que no puedo parar con exámenes, trabajos, vida comunitaria, apostolado y mil pequeñas cosas que van ocupando estos momentos, por lo que parece que uno siempre llega justito". "En estos días previos a la ordenación sacerdotal me acuerdo mucho de mis catequistas, de mis abuelas, de los amigos de siempre y de tantos que he hecho en este...