¿Clausura?
Al llegar los períodos electorales, en las conversaciones en la mesa o en la quiete suele aparecer el tema de qué pasaría si que nos tocara estar en una mesa electoral («¿tendríamos que ir a nuestra ciudad de origen?»). Sin embargo, la conversación no abunda mucho, porque para el caso el noviciado está considerado “vida religiosa de clausura”: estamos exentos. ¿Pero es realmente nuestra comunidad de “clausura”? Si bien es cierto que en la vida del jesuita el noviciado es un período...